Sin duda, la temporada invernal puede ser más llevadera cuando consultas con el especialista. Una persona experimentada nos ayudará a conocer la mejor forma de prevenir a nuestros pequeños frente a enfermedades de tipo respiratorias, las más comunes durante los meses más fríos. Concretar una cita previa con el médico pediatra es fundamental para reforzar y conservar saludable al recién nacido, especialmente en los primeros meses de vida.
Consejos para fortalecer la salud del bebé en invierno
Las causas más frecuentes de afecciones características de los meses de invierno, se contraen en las guarderías porque resulta imposible alejar de todos los virus a los pequeños. Generalmente transportados por el aire, los contagios se producen entre personas de todas las edades, pero afectan con más fuerza estos virus invernales a tu bebé por ser más vulnerable.
Recomendada por los pediatras la revisión a través de cita previa resulta oportuna cuando se presentan los primeros síntomas, también cuando se advierte fiebre.
Es importante garantizar el buen estado de salud alejando a tu bebé de las personas que estornudan con frecuencia, tosen permanentemente o se suenan la nariz, ayuda a proteger de enfermedades y dolencias propias del invierno.
¿Cómo proteger la salud del bebé?
Las enfermedades más comunes son los resfriados, gripes o catarros, que se pueden evitar solicitando en el centro de salud tu cita médica, donde revisarán a su bebé. Reconocidos pediatras advierten a los padres que arroparlos demasiado no es la mejor solución, cuando se expone al pequeño a la humedad y el frío porque aumenta las posibilidades de resfriados.
Pasos simples y estrategias adecuadas contra los gérmenes pueden evitar las enfermedades comunes del invierno, como por ejemplo:
- Solicitar cita médica ante cualquier síntoma de resfriado.
- Lavarse las manos constantemente para eliminar gérmenes cuando se cambia el pañal, sobretodo antes de la preparación de las comidas.
- Higienizar las manos de tu niño antes del consumo de alimentos y cuando regresa de la calle o guardería. También debes lavar las manos de los otros niños que conviven en la misma casa, removiendo bien cualquier bacteria.
- Revisar las normas de la guardería, asegurándote de que existen espacios adaptados para bebés enfermos y sanos.
- Vacunar oportunamente cuando el médico pediatra aconseja, para proteger a tu bebé de bacterias y virus fortaleciendo la inmunidad de forma natural.
- Alimentar a los recién nacidos con leche materna, como mínimo durante los seis primeros meses de vida, garantizando la protección de su salud con los mejores nutrientes.
- Establecer horarios adecuados para favorecer el sueño y descanso nocturno a diario.